El ácido málico es otro tipo de ácido orgánico que se encuentra de forma natural en muchas frutas, especialmente en las manzanas, de ahí su nombre “málico”, que proviene de la palabra “malus” que significa manzana en latín. También se encuentra en otras frutas como uvas, peras y cerezas. Además de su presencia en frutas, el ácido málico también es producido en el cuerpo humano como parte del ciclo de Krebs, una vía metabólica que participa en la producción de energía.

En el contexto de la cosmética y el cuidado de la piel, el ácido málico se utiliza principalmente por sus propiedades exfoliantes y aclaradoras. A continuación, se describen algunos de los posibles beneficios y usos del ácido málico en productos cosméticos:

Exfoliación suave: Al igual que otros ácidos alfa hidroxi (AHA), el ácido málico actúa como un exfoliante suave. Ayuda a eliminar las células muertas de la piel, mejorando la textura y el tono de la piel y dejándola más suave y radiante.

Aclarado de la piel: El ácido málico puede ayudar a aclarar la piel y reducir la apariencia de manchas oscuras y decoloraciones, ya que contribuye a una exfoliación suave que elimina las células pigmentadas.

Estimulación de la renovación celular: Al exfoliar suavemente, el ácido málico estimula la renovación celular y puede ayudar a mejorar la apariencia general de la piel, haciéndola lucir más joven y revitalizada.

Propiedades antioxidantes: El ácido málico también posee propiedades antioxidantes, lo que significa que puede ayudar a proteger la piel contra el daño causado por los radicales libres y factores ambientales.

Es importante tener en cuenta que, al igual que con otros ácidos exfoliantes, el ácido málico puede causar irritación en algunas personas, especialmente si se usa en concentraciones más altas o si tienes piel sensible. Siempre es recomendable realizar una prueba de parche antes de usar productos que contengan ácido málico y seguir las instrucciones del producto.

Si tienes alguna preocupación específica acerca del uso del ácido málico en productos cosméticos o cómo incorporarlo adecuadamente en tu rutina de cuidado de la piel, es recomendable consultar a un dermatólogo o un profesional de la estética.